Proxecto Home Galicia celebró ayer su XX Festa da Solidariedade. Los actos comenzaron a las once de la mañana con una concentración en la plaza del Obradoiro, a lo que le siguió la asistencia a la Misa del Peregrino en la catedral. Después, la fiesta se trasladó al Multiusos do Sar, donde se reunieron cerca de 2.000 personas para disfrutar de un almuerzo conjunto, tras el cual usuarios de los centros gallegos de la entidad realizaron varias representaciones artísticas.
Al acto asistió el director de Proxecto Home Galicia, Ramón Gómez Crespo, y contó con la presencia de los concejales de Cultura, Ángel Currás, y de Benestar Social, Paula Prado.
Proxecto Home cuenta con nueve centros en la comunidad gallega y atiende a una media de 550 personas cada año, 300 de ellas en Santiago, con un porcentaje del 90 % de rehabilitados. Sus servicios son gratuitos, e incluyen terapia familiar, asistencia jurídica o cursos de formación, además de la esencial cura de la adicción. La asociación cuenta con varios programas terapéuticos, especializados en diferentes tipos de perfiles.
Crespo afirma que un «50 % dos usuarios son adictos á cocaína». Aunque las cifras de personas asistidas se mantienen cada año, destaca que «si que houbo un pequeno repunte coa crise».
Uno de los pilares básicos de este programa son los voluntarios. La asociación cuenta con 120 personas en toda Galicia que colaboran con ella. Carlos García empezó en el Proxecto hace 12 años debido a la adicción de su hijo. Tras la cura del joven, siguió ayudando en el programa e incluso ha acogido a chicos en su casa. Sus labores son variadas, y van «desde acompañarlos a por metadona a llevarlos a actividades de ocio para que se distraigan».
Por otro lado están los que han tenido la desgracia de caer en una adicción. Carlos es una de las altas del programa terapéutico del Proxecto Home. Alcohólico y enganchado a la cocaína, decidió en el 2005 que tenía que cambiar. «Chegou un momento que estoupou todo: no traballo, coa muller, coa familia…».
Tras dos años en el centro que la asociación tiene en Vigo recibió el alta y está reinsertado en la sociedad. Antón fue compañero de Carlos en el centro de Vigo. Oriundo de Viveiro, señala que «marchei dalí en parte para cortar lazos co pasado». En su caso la adicción era múltiple. «Era adicto á heroína, pero valíame calquer cousa con tal de que colocase».
Fuente: La Voz de Galicia
